La contrapublicidad es una respuesta comunicativa y negativa a la publicidad llevada a cabo por grupos que repudian el modelo económico que predomina y la utilización del mismo por parte de las empresas para incitar al consumo excesivo y sin límites.

Razones de la existencia de la contrapublicidad y su utilidad

Cada vez más popular incluso en países desarrollados, la contrapublicidad, cuya masificación es también producto de la expansión de las empresas y su llegada a la sociedad mediante las tecnologías actuales, cuenta principalmente con tres pasos:

El primero es dar cuenta y reunir argumentos acerca de por qué se está en contra de una determinada publicidad.

En general, las más propensas al repudio son las que más dejan entrever que la población está en condiciones de realizar un gasto masivo de aquello que se promociona.

Razones de la existencia de la contrapublicidad y su utilidad
El segundo es modificar por completo los anuncios del responsable de dicha campaña publicitaria y a quien se pretende denunciar; este proceso consta de difundir al máximo las críticas hacia una marca y su comportamiento comercial aludiendo a todas las anteriores.

Se trata de cambiar todas las imágenes y textos de cada una a fin de mostrar lo que significa realmente para que los receptores de las campañas den cuenta de ello y, así, se pueda trasladar el mensaje de la denuncia.

En tanto la segunda es implementando una campaña original de denuncia; es decir, que no sea un simple rechazo a su publicidad con argumentos, sino expresar todo lo que esconde detrás, poder convencer a la mayor cantidad de personas posible y terminar con ella.

Si bien esto último puede llevar mucho tiempo, el procedimiento correcto para lograrlo es realizar la planificación publicitaria con todo lo pertinente: investigación, estrategias, objetivos, plan de medios y creatividad, entre otras.

¿Quién genera la contrapublicidad?

De este modo los grupos generadores de la contrapublicidad pasan a ser los anunciantes de lo que ellos creen que es realmente y, de alguna manera, pagan con la misma moneda al elaborar su mensaje y difundirlo con las mismas técnicas que la organización empleó para engañar.

Es que el objetivo de los grupos que se dedican a la contrapublicidad no es únicamente que la gente sepa la verdad sobre un producto que se publicita, sino también crear un modelo que se oponga y luche contra los movimientos que promueven la producción y consumo de comidas o elementos perjudiciales.

¿Quién genera la contrapublicidad?

Claro está que, para cumplir con el mencionado fin, estos individuos, que suelen estar en contra de la globalización, se hacen eco de cuestiones y valores indispensables para la vida humana como los derechos humanos, la justicia y el cuidado del medioambiente.

Las grandes empresas lo padecen

En este contexto, grandes empresas presentes en todo el mundo desde hace décadas como MCDonald’s, Coca Cola y Marlboro son las que más han padecido la contrapublicidad por parte de grupos que se dedican justamente a concientizar y a desvelar los detalles ocultos.

España fue uno de los países que tuvo más organizaciones dedicadas a la contrapublicidad las cuales se hicieron eco de cómo la publicidad genera mayor consumo de productos dañinos y por supuesto, incrementaba sus ganancias gracias a ella.

Lo cierto es que la consolidación de la contrapublicidad alcanzó su mejor performance a principios de este siglo en el marco de la utilización excesiva de la publicidad para persuadir y en todos los ámbitos (calles, transporte público e internet).

También es de público conocimiento el fenómeno llamado contaminación visual, que consiste en el abuso de grandes anuncios publicitarios puestos en edificios y que distraen a los conductores de vehículos.

La contrapublicidad o subvertising es considerada una manera novedosa y pujante de resistencia cultural que busca establecer un cambio sustancial en el comportamiento de los individuos frente a la publicidad.

Una organización busca constantemente promover el consumo de sus bienes para incrementar su caudal de clientes y sus ganancias. No obstante, antes de darles el gusto debes conocer las ventajas y las no mencionadas contras de los mismos.